Entonces, Braulio descendió a una de las ramas más bajas del olmo y, señalando en la dirección de las macrogranjas, dijo a los allí presentes:
- En
nuestra querida España en general y en nuestra gran Castilla en particular, siempre
critican y criminalizan a quien dice la verdad incómoda, aquella que nadie
quiere oír, a aquel que mete el dedo en la llaga. Nadie puede negarlo.
Eso es un hecho.
La
carne de ganadería extensiva es de mejor calidad que la de ganadería intensiva
y, por supuesto, mejor que la de las macrogranjas. Nadie puede negarlo.
Eso es un hecho.
La
proliferación de macrogranjas en la “España vaciada” está acabando con la ganadería
extensiva y/o familiar. Nadie puede negarlo.
Eso es un hecho.
La
proliferación de macrogranjas, en detrimento de las explotaciones ganaderas
familiares o extensivas, contamina el acuífero y el suelo de la “España
vaciada”, lo que ha producido que el agua no sea potable en algunos pueblos de
nuestra geografía, donde con explotaciones familiares o extensivas sí lo era.
Nadie puede negarlo.
Eso es un hecho.
Las
macrogranjas no generan apenas puestos de trabajo. Allí donde se establecen no
disminuye la despoblación y sí aumenta la contaminación. Nadie puede negarlo.
Eso es un hecho.
Si
alguien dice algo contra las macrogranjas y defiende, al mismo tiempo, las
explotaciones ganaderas familiares o extensivas, es muy probable que le pongan
a parir. Nadie puede negarlo.
Eso es un hecho.
Pobre de aquel que diga algo
en contra de las macrogranjas, de sus efectos en el acuífero, de la peor
calidad de la carne respecto a las explotaciones familiares o extensivas, porque pedirán su cabeza o intentarán obligarle a callar. Nadie
puede negarlo.
Eso es un hecho.
Pero, a pesar de que las palabras de Braulio eran ciertas, la gente acudió a votar mayoritariamente a aquellos que defendían a capa y espada la proliferación de macrogranjas. Aunque en su fuero interno sabían que eran malas para sus intereses, dañinas para el acuífero, y aumentaban la despoblación.
Nadie supo explicar por qué aquellos hombres y mujeres hechos y derechos tiraban piedras contra su propio tejado.
En Arévalo, a seis de enero de
2022.
Luis J. Martín.
Macrogranjas porcinas próximas a Arévalo.
"Es evidente que estoy
en contra de las macrogranjas, como lo está mucha gente, pero mis
declaraciones son como ministro de Consumo."