miércoles, 20 de noviembre de 2024

PATO COLORADO

 


Pato colorado (Netta rufina).

El pato colorado es un pato buceador, el más grande de esta categoría en nuestra fauna. Aunque al alimentarse se puede comportar como un pato nadador, es decir, levantando la popa mientras sumerge la cabeza.

Macho: El rasgo más distintivo es su voluminosa cabeza anaranjada, que presenta sólo en plumaje nupcial (octubre a junio), pues tiene la facultad de erizar o, más bien, esponjar las plumas de la cabeza, ofreciendo así un aspecto más abultado que cuando está relajado. El pico es rojo coral. Popa, pecho, cuello y nuca son negros. Los flancos blancos y el dorso marrón con picos que bajan hacia los flancos a modo de flecos, no siempre visibles. Veamos algunas imágenes:

Arriba y abajo: Pato colorado (Netta rufina). Macho en plumaje nupcial. Cabeza anaranjada, pico y ojos rojos, pecho y cuello negros, subiendo por la parte de la nuca hasta la cabeza, popa negra, flancos blancos y dorso marrón con picos en forma de flecos hacia los flancos.

En plumaje de eclipse (junio a octubre) el diseño es parecido al de la hembra, pero con el pico totalmente rojo.

Arriba: macho con un plumaje intermedio entre eclipse y nupcial en junio.

Abajo: dos machos en plumaje de eclipse en junio. En ambos casos se distingue el pico rojo.


Hembra:  La parte superior de la cabeza desde el ojo y la nuca de color marrón oscuro y la parte inferior muy clara, casi blanca. El pecho y los flancos son marrón claro y el dorso y la popa un poco más oscuros. Pico muy oscuro con la punta y los laterales de tono anaranjado.

Arriba: Hembra de pato colorado, con su media cabeza oscura, mejillas casi blancas y pico oscuro con tonos rojos en punta y laterales.

Abajo: comparación entre macho y hembra.


Pollos e inmaduros: con un diseño de plumaje similar a la hembra, pero con el pico oscuro, sin matices anaranjados. El ojo en los pollos es oscuro, mientras que en los adultos es rojo en el macho y rojizo en la hembra.

Arriba: Hembra adulta de pato colorado con cinco pollos. La hembra es la primera por la derecha, se distingue por el pico oscuro con tonos anaranjados y el ojo rojizo.

Abajo: detalle de la cabeza de un pollo con el diseño parecido al de una hembra pero con el pico y el ojo oscuros.


Es una de las aves más bellas de nuestra fauna, especialmente el macho en plumaje nupcial y con las plumas de la cabeza esponjadas.

Por tierras castellanas de la cuenca del Duero no es una especie habitual. En Ávila hay observaciones puntuales en las lagunas de El Oso, charcas del Águila, Rosarito y otros pequeños humedales. Su distribución natural es una franja discontinua de humedales ligados al litoral mediterráneo, cuenca del Ebro, Mancha húmeda y Andalucía.

Todas las fotos han sido tomadas en humedales alicantinos y son propiedad de Luis J. Martín: © LJM.

Arriba: comparación entre un pato colorado (izquierda) y un porrón común (derecha).

Abajo: Comparación entre macho y hembra de pato colorado.


Arriba y abajo: dos machos de pato colorado, en la imagen inferior se le puede ver con el plumaje de la cabeza relajado, sin esponjar.

Arriba: macho inmaduro y macho adulto (pico rojo en ambos individuos).

Abajo: macho desperezándose.


Arriba: hembra de pato colorado. Me queda la duda de que pueda ser un macho inmaduro por el color oscuro del pecho y cuello, pero el pico despista.

Abajo: Grupo de dos hembras de pato colorado y dos machos en plumaje de eclipse (de izquierda a derecha: macho, hembra, macho, hembra).




sábado, 26 de octubre de 2024

HUMEDALES CERCANOS, ESPECIES LEJANAS.

 


A veinticinco kilómetros de Arévalo se encuentra la Laguna de El Oso en el municipio del mismo nombre,  uno de los humedales más importantes y representativos de la llanura cerealista castellana.
En la imagen de arriba podemos ver esta interesante laguna, situada en una zona endorreica, donde los aportes del acuífero subterráneo son la clave de su éxito como biotopo acuático.

También dentro de un radio de veinticinco kilómetros desde Arévalo, se encuentra la laguna de la Iglesia, en el municipio segoviano de Villagonzalo de Coca.
Se trata de una zona húmeda inundada regularmente con agua canalizada desde el río Voltoya, concretamente, desde el azud del Pinarejo, en el municipio de Aldeanueva del Codonal, situado 31 kilómetros al sur del humedal, cuyo agua es utilizado para la recarga del acuífero de Santiuste de San Juan Bautista a través de esta laguna, entre otros puntos.
En la foto anterior, una vista general de la laguna de la Iglesia.
En la imagen siguiente detalle de la variada avifauna presente en la laguna: azulones, fochas, cucharas y avocetas.

Muy cerca de la laguna anterior y en el mismo municipio, se encuentra la Laguna de las Eras, de inundación natural, en la imagen siguiente, vista parcial del humedal con el pueblo de Villagonzalo de Coca al fondo.
Este año, la laguna de las Eras se ha inundado gracias a las intensas precipitaciones del invierno y primavera pasados. Ha conservado una buena cantidad de agua durante el verano y, seguramente, debido a la salinidad del terreno ha recibido la visita de unos extraños viajeros, al menos por estas aguas interiores. Se trata del flamenco (Phoenicopterus roseus), que, además, ha mantenido una población de varias decenas de individuos desde mediados de agosto hasta mediados de octubre. Si rara es su presencia por estas tierras, más rara aún es su permanencia durante tanto tiempo. 

Otra de las lagunas situada en un radio de veinticinco kilómetros de Arévalo es la laguna Alba, en municipio segoviano de Villeguillo y próxima a las dos anteriores. 

También la visité durante el mes de octubre pero permanece prácticamente seca, tan solo tres avefrías se alimentaban en su escasa zona inundada.

A continuación, un pequeño resumen fotográfico de algunas especies presentes en estos humedales. Sirvan como pequeñísima muestra de su valiosa y rica biodiversidad:

Laguna de El Oso:

Arriba y abajo: Anthus spinoletta, bisbita alpino, en las someras aguas de los pastos inundados de la Laguna de El Oso.

Arriba y abajo: Vacas y cigüeñas blancas compartiendo espacio en la Laguna de El Oso. También había una cigüeña negra que no pude fotografiar.

Arriba y abajo: Cirgus aeruginosus, aguilucho lagunero hembra. Había ocho individuos posados o volando por el humedal.

Arriba y abajo: Gallinago gallinago, agachadiza común que se dejó ver por los bordes de la Laguna a últimas horas de la tarde.


Abajo: Grus grus. Grupo familiar de grullas formado por dos adultos y un pollo del año alimentándose en el borde de la laguna de El Oso, cerca de un grupo de azulones

Según avanza la tarde los grupos de grullas se van juntando cerca de las aguas de la Laguna de El Oso, junto al resto de la variada y rica fauna acuática.

Arriba vista parcial del aspecto que presenta La Laguna de El Oso el 24/10/2024. Donde las especies dominantes son el azulón y la grulla, junto a otras muchas, como gansos, rabudos, cucharas, frisos, cercetas, cigüeñas blancas y negra, garzas, avefrías, agachadizas, cormorán grande... 

Abajo vista parcial de la Laguna de El Oso, un buen ejemplo de cómo los métodos tradicionales de la ganadería extensiva conviven o coexisten con la fauna silvestre. Muestra clara de que la Biodiversidad y el beneficio de una explotación ganadera pueden y deben ir de la mano. Ecología en estado puro.


Vistas de la Laguna de El Oso con sus usos tradicionales,agricultura y ganadería junto a un buen número de especies de aves silvestres que encuentran en este espacio el descanso y el alimento necesarios durante sus desplazamientos migratorios.
Se podría decir que estos humedales son para las aves lo que las gasolineras y las áreas de servicio de nuestras carreteras lo son para los viajeros humanos. 

La Laguna de El Oso es un lugar especial para la observación de aves.
Un lugar donde las aves, descansan, se alimentan y refuerzan sus vínculos como pareja.En la foto superior vemos el ritual de emparejamiento de dos grullas adultas, delante de su pollo del año, tanto el macho como la hembra dan grandes saltos verticales una frente a otra. El pollo observa y aprende.

Laguna de las Eras:

Arriba: Calidris alpina, Calidris minuta y Charadrius hiaticula, correlimos común, correlimos menudo y chorlitejo grande en la Laguna de las Eras el 4/10/2024.
Abajo:  Calidris alpina, Calidris minuta: correlimos común y correlimos menudo en el mismo espacio.

Arriba y abajo Phoenicoperus roseus, flamencos en la laguna de las Eras el 4/10/2024. Al parecer llevaban ahí desde la segunda quincena de agosto.

Laguna de la iglesia:

Arriba, Egretta garcetta, cinco garcetas comunes junto a azulones, frisos y cucharas en la Laguna de la Iglesia el 4/10/2024.
Abajo, Aythya ferina, porrón europeo junto a tarro blaco y azulones en la laguna de la Iglesia el 22/10/2024.

Arriba: Anas platyrhynchos, Mareca strepera, Spatula clypeata, Fulica atra y Recurvirostra avosetta: azulón friso, cuchara, focha y avoceta en la Laguna de la Iglesia el 22/10/2024.
Abajo: azulón, focha, cerceta común y tarro blanco en la Laguna de la Iglesia el 22/10/2024.

Una pequeña muestra de la rica biodiversidad que atesoran estos pequeños espacios naturales acuáticos.
Reciben y acogen a grandes viajeros para permitirles llegar a su destino, tanto en su periplo otoñal hacia el sur, como en el primaveral hacia el norte. Gracias a estas "áreas de servicio" un buen número de especies aseguran su supervivencia.
Algunas, sólo unas pocas, se quedan a pasar el invierno entre nosotros, por lo que siempre es interesante la visita a estos humedales. Guardando siempre el respeto debido a sus valiosos habitantes. Manteniendo la distancia en las observaciones para evitar que se asusten y se vayan.
Antaño había muchas más zonas húmedas en el entorno de la Tierra de Arévalo. Sería necesario recuperar algunas lagunas y lavajos antes de que se pierdan definitivamente en el recuerdo. 
Todos saldríamos ganando.

En Arévalo, 4, 22 y 24 de octubre de 2024.
Luis J. Martín.

Observaciones en El Oso junto a Jorge Leonor, Juan Ramón Cuervo, Eneko y David García.