miércoles, 22 de agosto de 2018

MÁRMOL O ALABASTRO






ROMANCE A UNA ESCULTURA

Hay una hermosa escultura
en la iglesia de San Juan,
un buen ejemplo de arte
románico medieval,
un bello San Zacarías
subido en un pedestal
dentro de uno de los arcos
a la izquierda del altar.
Es una estatua de mármol,
precioso mármol albar,
igualando a las mejores
obras a nivel mundial,
aunque unos pocos se empeñan
en negar la realidad
y dicen que es alabastro
“por darlo notoriedad”
cuando alabastro es tan blando
que se podría rayar
al arañar con las uñas
por su menor densidad.
Y lo publican en libros
que vuelven a reeditar
cometiendo el mismo fallo
por despiste o terquedad.
Si en Italia cometieran
un fallo muy similar
y el David de Miguel Ángel,
el Moisés o la Piedad
dijeran que son de alabastro
de un alabastro normal
estando hechas en mármol,
en mármol de calidad,
seguro que les harían
ese fallo subsanar.
En cambio, aquí en Arévalo
se consiente y a callar,
no sea que al decir mármol
faltemos a la “verdad”,
a la verdad que nos cuentan,
a la "verdad oficial"
y así el error se mantiene,
se repite sin parar.
Aquí no entró el elefante
no lo dejaron entrar
no cabía por las puertas
de delante ni de atrás.
Así que esperó en la calle,
en la calle de San Juan,
paseando lentamente
con su correa y trompal
y afilando sus colmillos
en el crucero frontal
que está hecho de granito,
buen granito provincial,
¿o he de decir de alabastro?
Ya no sé ni qué pensar.

En Arévalo, a veinte de agosto de 2018.
Luis José Martín García-Sancho.
(Perteneciente a la serie: "Romances con trompal ").


Escultura de San Zacarías realizada en mármol blanco.

Erróneamente se ha dicho que la escultura de San Zacarías, que se encuentra en la iglesia de San Juan de Arévalo, está realizada en alabastro. Se trata de una confusión que se viene produciendo desde hace mucho tiempo, ni se sabe. Así aparece en libros, artículos y guías turísticas: como el San Zacarías de alabastro, sin que nadie se percatara del terrible error hasta que José Antonio Arribas se dio cuenta de que era de mármol cuando restauraba diversas esculturas, retablos y pinturas pertenecientes al patrimonio religioso de Arévalo.
José Antonio Arribas (1943-2013) era un artista licenciado en bellas artes, especializado en pintura y escultura. Era colaborador habitual de la revista “La Llanura”, que edita la Asociación de Cultura y Patrimonio “La Alhóndiga de Arévalo”.

Hay varias publicaciones que mencionan esta excepcional escultura entre sus páginas. Algunas repiten el error sobre el material en que está esculpida esta obra de arte:

- DE LA HISTORIA DE ARÉVALO Y SUS SEXMOS, 1928, (Montalvo):
"En el lado de los Evangelios y en la parte alta de los arcos de los enterramientos de Sedeño y Altamirano, hay una escultura bizantina de extraordinario mérito y antigüedad: representa un Doctor o Apóstol, leyendo un pliego a medio desenrollar, todo él protegido por una sencilla vitrina de cristales."


- ARÉVALO Y SU TIERRA, 1993. (Guerra, Oviedo, Ungría, Delgado, Del Río):
“En la misma capilla, se encuentra una de las obras de arte más importantes de la ciudad, la escultura en alabastro de San Zacarías, último tercio del s. XII; románica del mejor estilo borgoñón y precursor de la escuela del Maestro Mateo y del estilo del pórtico de San Vicente de Ávila. El sereno rostro, pliegues del ropaje y rizados simétricos del pelo y barba, son sus características estilísticas.”


- UN REINO DE LADRILLO Y ADOBE, 1999. (Díaz de la Torre):
“Entre las exentas sobresalen (…) y una talla en alabastro de un santo (se cree que pueda tratarse de S. Zacarías) de gran antigüedad. Esta última se data probablemente en el S.XII y debió ser jamba de apoyo en algún edificio románico.”


- SOBRE EL MUDÉJAR EN LA PROVINCIA DE ÁVILA, 2001. (Gutiérrez Robledo):
“Dentro del templo, en una capilla, se guarda una magnífica escultura de alabastro, sin duda procedente de una portada, de la que no puede precisarse más el origen. Pudiera corresponder a la decoración de una puerta meridional desmontada al construirse la muralla, pero igualmente podría pertenecer a cualquiera de los templos arevalenses desaparecidos.”


La iglesia de San juan es parte de la muralla de Arévalo.

- LA ARQUITECTURA MUDÉJAR EN ÁVILA, 2004. (López Fernández):
“En el otro cubo de la muralla que forma parte del templo se sitúa una capilla con bóveda barroca (…) y en la que se conserva una de las piezas escultóricas más importantes del románico abulense de fines del siglo XII, que tal vez formase parte de una portada al tratarse de una estatua columna, sin que pueda precisarse cuál fue su primitivo origen, aunque todo parece indicar que siempre perteneció a esta iglesia de San Juan.
Representa a San Zacarías que tiene una filacteria en sus manos con la inscripción “IOAN / EST MOMEN EIUS / PRECURSOR FUIT DO / MINI / IHESUS REDEN / PTORIS MUNDI” está realizada en alabastro y puede relacionarse con las esculturas del pórtico occidental de San Vicente e incluso con el Pórtico de la Gloria de la catedral de Santiago de Compostela.”


- EL ALABASTRO DE SAN JEREMÍAS, 2009. (Arribas Avilés):
"El MÁRMOL ESTATUARIO (que es del que hablamos) es un carbonato cálcico muy duro, altamente compacto, liso y de grano muy apretado. Su peso, aproximado, es de 3.000 kilos por metro cúbico y es idóneo para trabajos que han de durar varios siglos…
Recuerdo, con agradecimiento y claridad meridiana, las magistrales lecciones, teóricas y prácticas, que recibí, en mis comienzos artísticos, de uno de los grandes pintores y escultores que hubo en España en el siglo XX. Se llamó Javier Clavo (…) y tenía ramificaciones familiares en Arévalo. Él me enseñó a distinguir, entre otras cosas, el ALABASTRO DE DEPÓSITO ESPELEOLÓGICO del MÁRMOL ESTATUARIO DE CANTERA ABIERTA allá por los años sesenta. Desde entonces he esculpido más de treinta estatuillas en alabastro y otras tantas en mármol. En estos momentos poseo doce pequeños bloques, en alabastro bruto, a disposición de quien quiera conocer la naturaleza de dicho material… No tengo ningún inconveniente para seguir hablando de alabastro, de mármol, de objetividades o de fábulas inventadas por no sabemos quién. Pero hay realidades que son Realidades como el nombre SAN VITORINO, EL MÁRMOL DE SAN ZACARÍAS.”


- MEMORIA MUDÉJAR EN LA MORAÑA, 2011. (Gutiérrez, Moreno, de Tapia, Zancajo, López):
“Entre las piezas de arte mueble es la más singular el San Zacarías románico expuesto en una de las capillas de la cabecera. Se trata de una talla en alabastro que originalmente pudo pertenecer a la portada meridional del templo, probablemente desmontada al construirse la muralla. San Zacarías, padre de San Juan Bautista, se presenta rígido, hierático, portando un rollo desplegado en el que Martín Alonso lee: “IOAN / EST MOMEN EIUS / PRECURSOR FUIT DO / MINI h… / REDEN / PTORIS MUNDI” (Juan es su nombre. Fue el precursor del señor, redentor del mundo) haciendo alusión al pasaje en que, tras haber quedado mudo, Zacarías da nombre a su hijo en el momento de ser circuncidado. Gutiérrez Robledo ha puesto su buena factura en relación con la fase borgoñona de San Vicente de Ávila y con los modelos derivados de ella aunque sin alcanzar su calidad, con lo que hay que suponerla en el último cuarto del siglo XII.”
- ARÉVALO Y SU TIERRA, 1993. (Guerra, Oviedo, Ungría, Delgado, Del Río), (REEDICIÓN DE 2013)
“En la misma capilla, se encuentra una de las obras de arte más importantes de la ciudad, la escultura en alabastro de San Zacarías, último tercio del s. XII; románica del mejor estilo borgoñón y precursor de la escuela del Maestro Mateo y del estilo del pórtico de San Vicente de Ávila. El sereno rostro, pliegues del ropaje y rizados simétricos del pelo y barba, son sus características estilísticas.”

Detalle del rostro de San Zacarías, donde se aprecia una antigua rotura en la nariz y, también, que en algún momento tuvo los iris coloreados de negro y los labios de rojo.

Aunque en algunas guías de arte o turísticas se ha solventado el error en otras aún perdura. En estas últimas, cuando ha sido posible, se ha comunicado la equivocación y en varios casos han enmendado el error rápidamente cambiando alabastro por mármol. Lo cual es de agradecer. He aquí un par de casos:




Recientemente, para su traslado a distintas exposiciones, se le ha incrustado por la parte trasera una placa de hierro desde la cabeza hasta los pies que afea la obra y puede que la esté perjudicando ya que es posible que esté tiñendo el mármol de óxido.


La valiosa escultura se puede visitar en la iglesia de San Juan de Arévalo y se encuentra en un arco al lado de los Evangelios. Todos los autores parecen coincidir en que la escultura de San Zacarías es una de las piezas escultóricas más importantes del románico abulense. Siendo así, se debería de enmendar el error, en la manera de lo posible y, al menos, que cualquiera que vaya a verlo pueda leer un rótulo escrito de forma correcta y donde ahora pone, aunque tachado de forma chapucera, "alabastro", ponga de una vez por todas "mármol" que es lo correcto, lo verdadero.
Un rótulo parecido a los pies del David de Miguel Ángel en el museo florentino de la Academia sería impensable, ¿por qué aquí lo damos de paso y el error y la chapuza perduran a lo largo de los años? 
Hasta aquí los hechos, que cada cual saque sus propias conclusiones.

Rótulo actual en el que se mantiene el error. Se encuentra a los pies de la escultura y se puede leer, aunque ligeramente tachado, alabastro como material en el que se ha realizado la obra. Error y chapuza juntos a los pies de una de las mejores obras de arte abulense.

BIBLIOGRAFÍA:



Agradezco a Juan Carlos López Pascual la bibliografía que ha aportado.

La iglesia de San Juan, donde se encuentra la escultura, se construyó adosada a la muralla.


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2 comentarios:

  1. En tu línea Luisjo, “haciendo amigos”. Porque aquí suele pasar que a quien lleva la contraria a la “verdad oficial”, como bien dices, le miran mal, le tratan de estúpido, de entrometido, de díscolo, de prepotente. En fin, qué te voy a contar que no sepas.

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  2. Gracias por tu comentario, entiendo que amigo. Si al escribir sobre algo solo pensara en agradar a todos o en no desagradar a nadie, sería incapaz de escribir una línea.

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