viernes, 23 de diciembre de 2011

LA SONRISA

Miraba atentamente como salía el chorro del grifo. El blanco de aquellos ojos tan abiertos contrastaba con el moreno de su cara.
Acababa de llegar a casa y no se había fijado en el árbol iluminado lleno de regalos. Tiró la bolsa de golosinas y se fue directamente al baño donde Paco se afeitaba con el grifo abierto. Casi no llegaba al lavabo, pero estiró el brazo todo lo que pudo hasta rozar el agua con la punta de los dedos. Después se los llevó a la boca y sonrió.
Desde que llegó a España era la primera vez que le oían reír.

Por: Luis José Martín García-Sancho